top of page

El “mercado negro del recreo” domina planteles mientras la SEP celebra el fin de la comida chatarra

Ciudad de México.— Mientras el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Mario Delgado, asegura con entusiasmo que “el 86 por ciento de las escuelas del país ya erradicó la venta de comida chatarra”, los patios escolares cuentan otra historia: la del floreciente mercado negro del recreo, donde dulces, papas y refrescos cambian de manos como si fueran contrabando.

“Ya no hay papitas en la cooperativa”, confiesa una estudiante de secundaria de Iztapalapa, “pero hay de todo en la mochila de los compañeros. Hasta promociones: dos chicles por una tarea.”

Bajo el programa “Vive saludable, vive feliz”, la SEP presume un éxito casi heroico en la transformación alimentaria nacional. Sin embargo, la realidad huele más a fritura recalentada que a desayuno balanceado. Y es que, a la sombra de los discursos, la cultura del antojo resiste con creatividad insurgente.

🍫 Del recreo al contrabando

En múltiples escuelas, las cooperativas han cerrado o se han convertido en fachadas impecables de frutas cortadas y agua natural. Pero detrás del pizarrón, la economía del recreo encontró su propio sistema financiero.
Ahora, los alumnos trafican con gomitas, flanes y refrescos mini con la discreción de agentes encubiertos.

“Le dicen ‘comercio saludable’”, explica un maestro que pidió anonimato, “porque los niños te ofrecen el refresco junto con una rebanada de pepino, para equilibrar.”

El ingenio infantil ha superado cualquier estrategia gubernamental. Si antes existía el tianguis cultural, ahora prospera el tianguis calórico, donde lo prohibido tiene más sabor y mejor margen de ganancia.

🏛️ Los contratos de la buena alimentación

En paralelo, la SEP firmó convenios con empresas del ramo alimenticio para “impulsar la cultura de salud”. Los mismos logotipos que decoran las máquinas de frituras aparecen en los manuales de “alimentación equilibrada” distribuidos en las escuelas.

Un funcionario explicó que “no hay contradicción, porque los contratos también son saludables: están bien balanceados, como las calorías”.

Fuentes extraoficiales aseguran que parte del financiamiento de las campañas educativas proviene de industrias que, paradójicamente, fabrican los productos que se busca erradicar.
En redes sociales, los usuarios lo bautizaron como el programa “Por una niñez saludable… con sabor a patrocinio.”

📣 Triunfalismo de escritorio, obesidad de recreo

Mientras las cifras oficiales se inflan, los niños hacen fila no en la cooperativa, sino en la esquina tras el salón, donde un “dealer de frituras” ofrece lo que el sistema educativo no puede: sabor y complicidad.

El discurso gubernamental, lleno de gráficas optimistas, se enfrenta así a una contradicción visible: el éxito que no se mastica.

“Los números son saludables, pero la realidad sigue siendo ultraprocesada”, ironiza una nutrióloga escolar.

⚖️ La moraleja

México presume su cruzada contra la comida chatarra, pero el antojo se rehúsa a morir bajo decreto. En las aulas, las frutas marchitan en el refrigerador, mientras las papas viajan de mano en mano con la clandestinidad de un acto revolucionario.

Al final, como dice un letrero pintado en una barda escolar:

“Prohibido vender papas… excepto en el mercado libre del recreo.”

Patrocinio y contratos_JPG.jpg
Adios a la comida chatarra_JPG.jpg
ChatGPTMercado negro de dulces_9 oct 2025, 02_56_58_JPG.jpg
Piramide de nutricion_JPG.jpg

La guerra descarnada
en el recreo.

La guerra del antojo_JPG.jpg
Por una niñez saludable_JPG.jpg

La guerra de baja intensidad
en el escritorio.

RETORNO-A-INICIO.jpg

CUIDEMOS EL PLANETA

CEO : Ignacio Romero

Derechos Reservados/2025   

bottom of page